lunes, 27 de abril de 2015

Te quiero

Y de pronto se te escapa un "Te quiero"...

Cuando empiezas una relación, dependiendo de lo abierto que este tu corazón a enamorarse, las mariposas y demás efusividades, propias del amor más adolescente, se apoderan de tí antes o después.
Yo, romántica de los pies hasta el último pelo de mi cabecita loca, soy enamoradiza sin remedio alguno ; lo cual me produce, en muchas ocasiones, tremendos quebraderos de cabeza. Porque enamorarse no es tan fácil como parece y muchas veces ansiamos tanto el sentir esa sensación que nos calienta el corazón, que nos equivocamos,confundimos sentimientos y muchas veces, nos damos en cuerpo y alma,sin pensar,a personas que no están al mismo "nivel de enamoramiento" que tú.

Pero ¿Cómo puedes medir si la otra persona siente lo mismo que tú o en el mismo grado? Lamentablemente, eso no se puede saber, y te dejas llevar por tus instintos, por lo que sientes y si no te llevas un batacazo es que has tenido suerte.

Después de muchos años buscando y maldiciendo a los cuentos de princesas y todas esas películas romanticonas que me han creado unas espectativas demasiado altas sobre el amor, tengo una visión bastante distinta de qué es lo que busco en una pareja.

Cuando esa persona es capaz de hacer cosas por tí que otras no harían, cuando os miráis a los ojos y no hace falta decir mucho más, cuando un abrazo calma la peor de las tormentas y las risas superan con creces cualquier enfado tonto que podáis tener. Creo no confundirme al decir, que esa persona está por tí,para tí,para hacerte sentir única, para hacerte, para haceros felices.

Entonces sí, entonces los "Te quiero" ya no se escapan, te salen del pecho porque no puedes callar lo que sientes.

2 comentarios: